NO TENGO NADA QUE DECIRTE
Con inmenso dolor y reconocimiento al hombre poeta,
que iluminó mi juventud, me llenó de sueños
y me enseñó a querer la cosas más sencillas de la vida…
¡No tengo nada o casi nada que decirte!
Lo has dicho todo o casi todo con tu voz de hombre
que nació para aferrarse a sólo de tenerse,
de creer que todo puede ser verdad
si te decides a mirar cuán triste,
puede ser vivir penando que un día vas a morirte.
¡No tengo nada o casi nada que decirte!
Fuiste dueño de todo o casi todo,
bastaba escuchar tu perorata
para creer que la muerte ya no existe,
porque solo muere el que se olvida
que llegas sin nada y así deberás irte.
¡No tengo nada o casi nada que decirte!
Tuviste todo o casi todo
con tan sólo mirar al horizonte.
Tu paso por la vida fue tan corto,
pero bastó para saber que existe
una oportunidad, y tú la cultivaste.
¡No tengo nada o casi nada que decirte!
Te has liberado por fin de ser poeta,
cantor y caminante, maestro y aliciente.
Sólo pudo llevarte de este mundo
la misma mano que algún día tú ayudaste.
No había otra forma de salvarte del invierno:
¡Adiós, Facundo! ¡Mirad que ya es… un poco tarde!
¡Lo predijo! ¡Él lo sabía!
ResponderEliminarCallaron su boca más no su voz. Él ya pertenece a todos nosotros, a nuestras causas más puras, a nuestros ideales.
¡Viva Facundo!
¡Brutal ataque a la buena voluntad, a la voz poética, al amor!
ResponderEliminarLa violencia, como brazo armado de la ignorancia y la crueldad, hoy empañan la clara luz de la sabiduría.
Antonio Izaza
"No estás deprimido estás distraído"
ResponderEliminarUn legado de Facundo
http://www.youtube.com/watch?v=MCefbj0jFdg
¡Gracias, viejo!
Bellas y emotivas palabras a un grande del discurso poético.
ResponderEliminarSu legado es algo que jamás nos robarán.
Me uno al sentido homenaje a Facundo Cabral puesto en pie en los versos de Arturo Juárez. Con un abrazo.
ResponderEliminarSalud