martes, 27 de septiembre de 2011

THE WOMAN OF ROLF ARMSTRONG

"La vida es o debiera ser así: Una cadena interminable de momentos que se enlazan para formar, lo que a la postre, le llamaremos vida."

¿Cuestión de sensibilidad, de magia, de misticismo? Sinceramente creo que no. Más bien considero que es la perspectiva con la que admite uno que estamos vivos, concientes, perceptivos.
Una tarde como tantas, al husmear en Facebook, encontré este enlace compartido por Arte Satin (usuario y amigo). 
Al escuchar tan excpecional y dramática melodía, me sentí atrapado en uno de tantos momentos que bien valen la pena ser atesorados y puestos a salvo en la memoria emocional de la existencia.
Como acto de correspondencia a tan sublime instante, escribí, como dictado por el espíritu supremo de la realidad cotidiana, este sencillo poema.
Siete versos con una sola intención pero con una mar de interpretaciones. Cual collar de perlas engarzadas, cada palabra intenta darle a la melodía un merecido reconocimiento por tan portentoso regalo.
Valga entonces decir que no todo es poesía, ni música, ni momentos de elevación o escape emocional, pero... ¡Ay, cómo ayudan a forjar el tesoro tangible de nuestra existencia!
Gracias a Arte Satin por obsequiarme esta oportunidad inigualable.


ARTE SATINADO

Me extasía el arte satinado de tu piel,
cual mustio halo que descorre sus sedas adosadas
a la trémula carne que palpita
bajo la lupa ardiente de mi angustia,
de verte discurrir entre el espacio
de este silencio de mi casa…
y la magia diamantada de la luna.

Arturo Juárez Muñoz




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